PSOCIONAMIENTO: CORRUPCIÓN Y POLÍTICAS SOCIALES.

Las prácticas de corrupción son un veneno que dinamita la posibilidad de generar políticas de gobierno exitosas. Con esta problemática, se fomenta una cultura de ilegalidad y de impunidad que degrada paulatinamente la confianza y la credibilidad de la gente en sus gobernantes. También, se merma la eficacia de las acciones y los programas que se implementan desde las diferentes instancias y, por ende, la atención a problemáticas y necesidades comunitarias. Cuando esta problemática se generan en materia de política social, los resultados son preocupantes, ya que el objetivo de potenciar un desarrollo social que coadyuve a generar mejores condiciones de vida, se ve frustrado y los resultados no son lo esperado. Así lo demuestra la política social a nivel nacional, donde los resultados son negativos; lo demuestra el último informe del CONEVAL donde se refleja un incremento en México de 2 millones más de personas en situación de pobreza, en solo dos años, del 2012 al 2014; y una población donde poco más de la mitad se encuentra en este mismo estándar. Dicha situación nos lleva a la necesaria reflexión, evaluación y participación, para verificar si verdaderamente el rumbo que lleva la estrategia nacional de acciones y programas, realmente van enfocados a atender los problemas de desigualdad, pobreza y falta de oportunidades en México, sino se hace imprescindible el llamado al cambio de rumbo inmediato. Y todo pinta a que por ahí es la ruta.